CAPITULO 7c.- LA MERIENDA





Alicia,
para ti este cuento pueril.
Ponlo en tu mano pequeña
donde descansan los cuentos triviales,
enlazados en guirnaldas de la memoria ya marchita.
Es la ofrenda de un peregrino
que las recogió en países lejanos.
(Carrol Lewis)




CABALLERO BLANCO;
Sólo escoltarás a Alicia hasta el confín de las casillas donde la pubescente sea coronada por el índice de libros infantiles.
Agitarás tu pañuelo blanco;
que semeje cirros que parezcan rizos
y aplacarás tu soledad fuera de todas las jugadas
que esa mujer de otro ya será carnada.
Jaque; Carrol.

DoDo:
En estos amores
la carnal malicia está vacía de sangrías
Son amores gentiles y elegantes. Racionales textos.
El ideal del amor es la distante amada e inalcanzable amor.
Lorena;
Estos son amores victorianos, severos, hipócritas, moralistas, puritanos.
Y en lo profundo;
bestiales, mórbidos, fatalistas y al fin y al cabo; chabacanos
No es amor correcto
el amor impracticable.
Que te lo cuente un reverendo
Jaque Mate; míster

Carrol del día:
Esta no es la frase correcta;
Me gustaría casarme con su hija de once años












Esto es lo victoriano: Si pasados seis u ocho años siguiera sintiendo lo que siento ¿Sería posible una alianza?. . .
He aquí la verdadera causa del gato encerrado en el texto. Es el único animal que hace lo que piensa. Y ese es todo su misterio.